La soledad de las plantas

The Inner Life of Plants era el titulo que Patricio Pron erróneamente atribuía a un álbum de Stevie Wonder que escuchó en su adolescencia. The Secret Life of Plants es el verdadero nombre de aquel álbum, banda sonora de un documental que a su vez está basado en un libro, todos homónimos. ¿De qué iba ese libro? La experimentación con las plantas en Estados Unidos durante los años 70 para determinar su posibilidad de comunicarse.
La vida interior de las plantas de interior es el título que, después de la confusión inicial y distintas variaciones, Patricio Pron dio a su cuarta publicación con el sello editorial Mondadori. ¿De qué va este libro? Se trata de cuentos en los que el autor argentino decide experimentar con personajes que sufren la imposibilidad de comunicarse. Todos están solos: el perro de Picasso; un escritor y jurado de un concurso literario de provincias y otro vecino del escritor argentino vivo; estrellas porno; una florista obsesionada con uno de antiguos sus clientes… Seres que comparten la soledad y la vulnerabilidad de las plantas. Historias que se entrelazan mediante un flujo temporal que parece eternizar a sus personajes, que parecen sacados de algún cuadro de Edward Hopper.

En «Es el realismo», cuento ganador del Juan Rulfo y que consta en El mundo sin las personas que lo afean y lo arruinan (2010), Pron se valía de la figura del escritor, que muchas veces tiene poco y nada que ver con la literatura, para reflejar las miserias que están detrás del mundillo literario, que tampoco tiene nada que ver con la literatura: los talleres y los premios literarios, el anhelo de la capital en los escritores de provincia, las alabanzas y las diatribas contra el resto. En La vida interior… vuelve sobre esto en varios cuentos, entre los que encontramos al protagonista de «Trofeo de los amantes que han partido», reflejo de esos escritores que luchan por obtener la atención pública que valida la existencia social del escritor sin pasar por el que, para muchos, es el mayor inconveniente de ser escritor: tener que escribir alguna cosa cada cierto tiempo.
«Algo de nosotros quiere ser salvado», uno de los cuentos que el argentino sitúa en su natal Rosario, parece ser uno de los pensamientos de cada uno de los personajes. ¿Son estos solitarios los que recaen en los libros de autoayuda?, ¿los libros salvan? Este relato lo que consigue es reafirmarnos en la soledad que conlleva el acto de leer y que nos asemeja con los personajes de sus páginas; compartimos con ellos la libertad de ser solitarios y vulnerables, como las plantas.

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