Efervescente

Fotografía de Vanessa Terán Iturralde
Esa mirada que nunca quisieras ver en los ojos de Sebastián. Esa mirada dilatada. Expectante. Acechante. Impropia. Sucia. Que intenta ser disimulada, pero que es un insulto a tu capacidad de inferencia. Esa mirada que te embarra. Que ante los demás te convierte en estúpida. En ingenua. En ciega. Esa mirada es mía.
Se enfoca en mi iris. Luego fluctúa. Se desliza hacia abajo —a una tasa de varias negaciones por minuto—, hacia mi yugular. Hacia mis clavículas. Hacia la ondulación de mi esternón. Vuelve a mis pupilas. Y en seguida rebota en tu rostro, donde —a una tasa de varios mea culpas por minuto—, se agazapa.
—Salud
Levanto mi copa de champaña, las burbujas me darán la descarga eléctrica que necesito. El tintineo de los cristales estalla. Y —a una tasa de varios “ya fue” por minuto— yo también brindo por ustedes, los novios.
***
Marcela Ribadeneira (Quito, 1982). Escritora, crítica de cine y artista visual. Estudió Dirección Cinematográfica en Roma. Colabora con el diario británico The Guardian y con las revistas Ache y Gatopardo Ecuador (de esta última fue editora). Ha escrito para revistas como Mundo Diners, Vanguardia, Criterios y Nuestro Mundo, así como para los periódicos Ochoymedio, Expreso, El Quiteño y para la plataforma web La Comunidad Inconfesable (España). Sus textos han sido antologizados en Microquito I, Ciudad Mínima II, GPS (antología de cuentistas ecuatorianos, Sed de belleza, Cuba), La invención de la realidad (antología de crónica contemporánea de La Caracola editores) y Ecuador Cuenta.
Ha publicado relatos en revistas de Argentina, México y Estados Unidos y su trabajo en mixed media digital ha sido exhibido por la plataforma Cultura Colectiva (México). Actualmente es directora editorial de La Línea Negra y también dicta talleres de crítica cinematográfica y apreciación artística e iconografía. Acaba de publicar el libro de relatos Matrioskas, con la editorial Cadáver Exquisito.

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